JOFEMESA | Una carretilla es un vehículo motorizado que se utiliza para transportar palés, contenedores y otras cargas

Para empezar a pensar en la adquisición de una carretilla elevadora, es necesario tomar en cuenta las necesidades de la persona o empresa que le dará uso, porque dependiendo de eso es que se tendrá que decidir. A veces se cometen errores en la compra y venta de carretillas elevadoras usadas como:

Hay cosas que son de especial importancia, como el desplazamiento que puedan tener, el tipo de suelo donde se va a usar la carretilla, así como también las dimensiones del área de trabajo. También en el caso de que sean espacios cerrados es importante considerar que sea eléctrica por los contaminantes que emite, en el caso de espacios abiertos sí se puede optar por una carretilla que use gas o diésel.

En este sentido y con tantos factores a analizar, es lógico que se cometan ciertos errores  a la hora de elegir una carretilla elevadora usada, muchas veces estos errores son cometidos simplemente por falta de información.

Errores que tenemos que evitar:

A continuación mencionaremos algunos de los principales errores que se pueden evitar:

-No realizar una inspección completa de las condiciones en las que se encuentra la carretilla

-No evaluar el coste-tiempo

-No evaluar la rentabilidad, es decir, tal vez por el trabajo sea necesario adquirir una nueva, el rendimiento y la duración no será la misma

-No considerar lo adecuado entre carretilla de diésel o eléctrica

-Desconocer el desplazamiento y el peso o tipo de material que cargará

-Desconocer el mantenimiento que se le ha dado a la carretilla anteriormente

-No considerar las horas que va a trabajar la carretilla, para saber si dará el rendimiento requerido

-No pedir asesoría de un profesional en el sector, para saber con exactitud

-No preguntar por la antigüedad, las horas trabajadas, la carga de trabajo por día y sobre todo la preparación para su reventa

-No preguntar sobre el equipo de soporte, las garantías del fabricante o la persona encargada de darle mantenimiento.

-No evaluar el riesgo de que si algo sale mal con la carretilla usada, la pérdida podría ser irreversible, es decir, no estar conscientes de que es un riesgo trabajar con una carretilla usada

-No visitar suficientes proveedores, para poder comparar la calidad-precio de cada una

-Desconocer al proveedor, sus estándares, sus protocolos y su seriedad, puesto que es mucho el peso que manejan las carretillas elevadoras.

Es por ello, que es necesario, evitar comprar una carretilla usada de forma precipitada.

 

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